Definición de Cartograma

La cartografía es la disciplina que estudia los mapas. Esta disciplina presenta un amplio abanico de opciones, ya que en los mapas es posible introducir información sobre accidentes geográficos, infraestructuras de transporte, municipios y regiones, fronteras políticas y, en definitiva, cualquier información que tenga relación con el espacio geográfico.

Analizando el concepto con un ejemplo ilustrativo

El cartograma es una modalidad específica dentro de la cartografía y consiste en representar un territorio indicando de manera proporcional los valores de un asunto determinado. Así, en un cartograma sobre la población mundial aparecería el tamaño de cada país en proporción con el número de sus habitantes. Este mapa se podría representar con rectángulos para referirse a cada país y para tener una guía sobre la escala del mapa se especificaría una información complementaria en la que un rectángulo con un área concreta se correspondiera con una cantidad de millones de habitantes.

Si analizamos el ejemplo mencionado se pueden extraer varias conclusiones:

1) a pesar de que Rusia es el país más grande del mundo, en el cartograma su tamaño sería muy inferior al real porque el número de sus habitantes no es muy elevado,

2) los países con mayor tamaño serían China y la India, pues ambos son los más poblados del mundo y

3) el cartograma en su conjunto presentaría una imagen que no se corresponde con la que aparece en un mapa del mundo convencional.

Una herramienta para comunicar ideas

Las imágenes que aparecen en los cartogramas conectan con un fenómeno muy extendido: el predominio de lo visual sobre la información escrita. En este sentido, la información que se proporciona en este tipo de mapas es mucho más directa y sencilla que la que se podría expresar en un texto o en un cuadro estadístico.

Por otra parte, los cartogramas facilitan las comparaciones entre datos. Como es lógico, sirven para complementar las explicaciones de un texto con imágenes representativas.

Diferentes modalidades

El cartograma con contigüidad es aquel en el que el área geográfica representada aparece distorsionada pero compacta. Por ejemplo, en un cartograma sobre la densidad de la población en Latinoamérica todos los países se representan unidos, pero su tamaño depende de la densidad de cada país.

El cartograma sin contigüidad es aquel en el que la imagen de un territorio se divide en partes y estas se colorean para indicar una información concreta. Por ejemplo, en un cartograma de los países de la Unión Europea según sus vías férreas se separarían las naciones y en cada una de ellas se indicaría el dato concreto de kilómetros de vías férreas.

Por último, en el cartograma de Dorling se utilizan figuras geométricas para representar áreas geográficas.

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