Definición de Caso Gürtel
Periodista esp. e investigador
La política española ha pasado por muchas vicisitudes en estos últimos años, llevando a una coyuntura que sea tal vez la más tortuosa desde la transición de 1978.
Además del movimiento independentista catalán, que sea tal vez el asunto más prioritario de la agenda política española y una de las cosas que más preocupa a la opinión pública, tenemos también los numerosos casos de corrupción política que salpican a los principales partidos españoles y, especialmente, al Partido Popular.
Este formación derechista ha visto como muchos de sus altos dirigentes y cuadros intermedios pasaban por los juzgados para declarar, y eran condenados, en casos de corrupción política a gran escala. Un nombre propio destaca entre todos estos casos: la Gürtel.
La trama Gürtel o caso Gürtel es el nombre dado a la investigación de una trama de corrupción vinculada a mandatarios del Partido Popular (PP) de España que permitió financiar al Partido y metió dinero en los bolsillos particulares de los implicados.
La esencia de la trama era conceder contratos públicos a determinados empresarios dispuestos a financiar de sus arcas particulares el partido y realizar pagos a los dirigentes implicados.
Según la sentencia, el PP se benefició como organización de estos ingresos fraudulentos, para pagar campañas electorales, además del lucro a título personal de los cuadros del partido implicados.
Este caso ha sido tan importante que ha contado con ramificaciones (como el llamado caso Bárcenas por el apellido del antiguo tesorero del PP), y ha sido mencionado en otros juicios también por corrupción política.
De hecho, la moción de censura que llevó a la destitución de Mariano Rajoy (presidente del PP) como presidente del gobierno español en junio de 2018, tiene dos causas principales: su nefasta gestión del independentismo catalán, y su implicación en la trama Gürtel, que lo llevó incluso a testificar en el juicio.
La investigación empieza con la denuncia de un exconcejal del PP en el ayuntamiento de Majadahonda (Madrid) en 2007.
José Luis Peñas, amigo del empresario Francisco Correa (quien se revelaría más tarde como uno de los líderes de la trama corrupta) fue el delator que inició toda la maquinaria jurídica.
El caso llegó a anticorrupción, e inmediatamente fue creciendo en cuanto a dimensiones; Peñas habría recibido más de un cuarto de millón de euros de la trama, y disponía como pruebas incriminatorias de grabaciones obtenidas en secreto en reuniones.
Junto a Correa estaban implicados tres empresarios más: Álvaro Pérez -conocido por “el bigotes” por su pronunciado bigote-, Pablo Crespo y Antoine Sánchez.
El bigotes será, a posteriori y junto con Correa, una de las caras más mediáticas del caso.
En 2009 se producen las primeras detenciones, con una instrucción a cargo del célebre juez Baltasar Garzón, el cual será apartado del caso al ser suspendido de sus funciones de juez en 2010.
Existen sospechas muy fundamentadas -aunque hasta la fecha no probadas- de que el motivo de la suspensión de Garzón fue puramente político, debido a este caso además de a sus investigaciones sobre los crímenes de lesa humanidad del régimen franquista, que empezaban a afectar a dirigentes o antiguos dirigentes del PP.
En 2010 el caso salta a la palestra pública tras un reportaje de investigación publicado por el rotativo español El País, de tendencia izquierdista (próximo al PSOE, la formación socialista rival del PP, de derecha).
A partir de este momento y hasta ahora, el caso atraerá el interés mediático, ocupando portadas en todos los medios escritos (tanto en papel como digitales) y abriendo noticiarios, especialmente a partir de la celebración del juicio y con su punto álgido al conocerse el veredicto.
La investigación ha sido larga y laboriosa debido al gran número de personas incriminadas y al gran número de pruebas existentes.
La principal ha sido tal vez los llamados “papeles de Bárcenas” Una contabilidad fraudulenta que detallaba pagos no legales a altos cuadros del partido, entre estos, presuntamente el mismo presidente del gobierno español.
¿Y por qué digo presuntamente? Pues porque en dichos papeles figuraban pagos a nombre de M. Rajoy (a todas luces, Mariano Rajoy, un apellido y una inicial que, juntos, no son tan comunes, y menos entre altos dirigentes del PP…), del cual, la justicia española no ha podido establecer la vinculación con la persona que representaba…
Las comunidades autónomas donde se dieron estos casos fueron, principalmente, Valencia, Madrid, y Andalucía.
La estructura empleada por los corruptos era simple: a cambio de sobornos en dinero o en regalos (como viajes o trajes de lujo a medida) a funcionarios públicos, se obtenían contratos públicos con una sobrevaloración que permitía a las empresas de la trama lucrarse a expensas del erario público.
Dichas empresas organizaban eventos como actos políticos (mítines), congresos, presencia en ferias, así como se encargaban de servicios municipales como la información ciudadana.
La trama no solamente se lucraba, sino que estableció una serie de relaciones de clientelismo en el peor de los sentidos, que facilitaba su trabajo: allí donde había un alcalde o regidor del PP implicado, hacían acto de presencia las empresas que se llevaban los contratos públicos más jugosos.
Según la sentencia de 2018, el mismo PP se lucró, desde fecha tan tardía como 1989, de esta trama, pagando parte de algunas de sus campañas electorales con el dinero que salía de estas corrupciones.
Incluso unas obras en la sede central del PP en Madrid habrían sido pagadas parcialmente con dinero negro procedente de estas operaciones de corrupción.
El PP es, por lo menos hasta donde yo sé, el único partido de Europa -por lo menos desde la Segunda Guerra Mundial- que ha sido hallado culpable como persona jurídica por crímenes de corrupción.
Un “misterio” (que tal vez no lo sea tanto) que ha rodeado el caso Gürtel han sido las numerosas personas relacionadas que han muerto en extrañas circunstancias durante la investigación.
Es el caso del banquero Miguel Blesa, que presuntamente se suicidó con una escopeta de caza cuando existía la posibilidad que realizara ciertas confesiones para aligerar su pena.
Igualmente, la ex-alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, también falleció en extrañas circunstancias cuando empezaba a distanciarse del PP.
Los chistes sobre lo malo que era para la salud ser mencionado en el caso Gürtel corrían como la pólvora entre la ciudadanía española; hasta una docena de personas murieron durante la instrucción, algunas en extrañas circunstancias, como dobles caídas en su domicilio, o accidente de motocicleta despeñándose de un barranco.
El caso Gürtel ha sido el más grande, pero no el único que ha sufrido un país en el que, a momentos, parece que la corrupción política es generalizada.
Foto: Fotolia – Rider
Trabajo publicado en: Oct., 2018.
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