Definición de CEPAL

Las siglas CEPAL hacen referencia a la Comisión Económica para la América Latina y el Caribe, un organismo integrado en la ONU que se constituyó en 1948. En la actualidad tiene su sede en la ciudad de Santiago de Chile y hay varias oficinas en otras ciudades latinoamericanas.

El principal objetivo de esta institución es impulsar el progreso del conjunto de Latinoamérica y, al mismo tiempo, reforzar los vínculos económicos y sociales entre las naciones de la región.

Estrategia de la CEPAL a lo largo de la historia

A partir de la década de 1950 este organismo impulsó un modelo económico de tipo desarrollista, ya que por entonces en esta área geográfica las distintas naciones se encontraban en condiciones precarias, especialmente en relación con los bajos niveles de consumo y con un amplio abanico de problemas sociales.

Con la estrategia inspirada en el desarrollismo económico se produjo un crecimiento anual de casi el 3% del PIB hasta la década de 1980 y, paralelamente, una reducción significativa de los niveles de pobreza de la población total de América Latina.

La clave para conseguir dicho avance fue una paulatina modernización de la industria.

Como complemento a la estrategia de industrialización, la CEPAL ha impulsado otras estrategias: el fomento de las exportaciones, la realización de ajustes económicos para superar los problemas asociados con el endeudamiento y la incorporación de criterios de equidad social en los procesos de producción.

Un centro de pensamiento

La CEPAL pone en marcha todo tipo de investigaciones y estudios sobre temas económicos y sociales. Al mismo tiempo, facilita asistencia técnica a los distintos gobiernos y elabora propuestas en materias relacionadas con la gestión pública.

La comisión de la CEPAL está integrada por un total de 44 estados miembros, los cuales se reúnen cada dos años para evaluar las tareas realizadas e impulsar nuevos objetivos y líneas de actuación.

El planteamiento global de este organismo consiste en impulsar el desarrollo económico de una manera integral, ya que el crecimiento económico debe estar asociado a los principios de equidad social y a la sostenibilidad medioambiental.

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