Definición de Ciática

La Ciática es uno de los dolores más conocidos y padecidos por las personas adultas de mediana edad, se trata de un dolor muy intenso que se inicia en el glúteo y corre a lo largo de la pierna hasta la altura de la rodilla o incluso puede llegar al pie, por lo general se presenta en una sola pierna y puede ser percibido por quien lo padece como una sensación muy desagradable de corrientazo o descarga eléctrica. Cuando el dolor se localiza además en la zona lumbar o en la parte baja de la espalda se denomina Lumbociatica o Lumbociatalgia.

Ataque repentino, cuando menos se lo espera

Este es un dolor que normalmente se inicia abruptamente al hacer un esfuerzo físico o al adoptar una postura sostenida, es muy característico que una persona que se encontraba perfectamente bien se incline hacia adelante para tomar del suelo algún objeto, especialmente bolsas o paquetes pesados, y al tratar de incorporarse siente como si algo se rompe en su espalda quedando inmóvil. Muchas veces es necesario que alguien le ayude a incorporarse e incluso a desplazarse a algún sitio donde pueda recostarse.

El dolor de la Ciática es debido a la inflamación de un nervio llamado Nervio Ciático, de ahí su nombre. Este trayecto nervioso se origina en el glúteo y corre por la parte de atrás del muslo hasta la parte posterior de la rodilla, a partir de allí corre por el borde externo de la pierna y el pie.

Tomar medidas para que volver a sufrir del dolor de ciática

La Ciática suele ser en la mayoría de los casos una enfermedad autolimitada, es decir cede espontáneamente o con tratamiento en pocos días, si no se toman medidas como adoptar mejores posturas, bajar de peso y fortalecer la musculatura lumbar seguramente volverá a presentarse una o varias veces en otro momento de la vida.

Ante una crisis dolorosa lumbar, estas medidas serán de gran utilidad para aliviar el dolor:

• Mantenerse activo evitando los esfuerzos y los movimientos de flexión, extensión o rotación del tronco. Al contrario de la creencia popular, el reposo no solo no es recomendable sino que en un gran número de estudios se ha comprobado que retarda la recuperación e incluso se asocia con la exacerbación del dolor.

• Aplicar calor local.

El calor es un gran aliado para el dolor lumbar, resulta más efectivo si se aplica calor húmedo en vez de calor seco, para ello se recomienda humedecer una toalla en agua caliente a tolerancia y colocarla sobre la zona adolorida de 10 a 15 minutos varias veces al día.

• Fisioterapia.

La fisioterapia ayuda a que la crisis dolorosa cese más rápidamente, los medios físicos como el calor y el ultrasonido, la electricidad y los masajes son de gran utilidad. Debe procurarse que estas medidas sean aplicadas por un fisioterapeuta.

• Bajar de peso.

Un número importante de crisis tipo ciática ocurren en personas con sobrepeso y obesidad.

Una advertencia de algo aún peor, para tomar consciencia

En algunos casos la ciática puede ser un síntoma de alarma de enfermedades graves, en tal sentido es necesario someterse a una evaluación médica si se acompaña por otros síntomas como:

• Dolor que en vez de mejorar tiende a aumentar su intensidad, no cede con el uso de analgésicos, e incluso despierta al paciente por la noche.

• Pérdida de la fuerza o de la sensibilidad de una o ambas piernas.

• Incontinencia urinaria o fecal repentina.

• Fiebre superior a los 38,5 °C.

• Pérdida de peso.