Definición de Cultura Subjetual

Cultura subjetual es un concepto filosófico que reflexiona sobre el valor de la cultural poniendo especial hincapié en el valor de la subjetividad como un añadido a la propia naturaleza. El ser humano es un ser corpóreo pero también, un ser que tiene razón y conocimiento, algo que eleva su capacidad de aprender por encima del resto de seres. La cultura subjetual es aquella que deja huella en el sujeto, es decir, que cala en su ser.

De este modo y desde una perspectiva de la comparación con lo que implica sembrar una tierra para luego recoger los frutos de todo lo cultivado, la formación y el conocimiento también nutren el alma del ser humano. Por esta razón se utiliza de un modo habitual la expresión «ser una persona cultivada». En este sentido, la cultura aporta mayor libertad al ser humano y un horizonte de vida más amplio.

Alimentar el conocimiento

Desde esta perspectiva y por comparación visual existe un gran paralelismo entre el alma humana que en su pureza inicial va adquiriendo nuevas formas a partir de la cultura, caminos internos que dan lugar a nuevas formas de pensamiento y de expresión, con la agricultura a través del trabajo de un campo que también sufre su propio proceso de transformación a través del trabajo humano. El campo por sí mismo no daría los frutos que da si no fuese por las tareas que realiza el agricultor.

Del mismo modo, la cultura eleva el alma humana por encima de la propia naturaleza. La cultura subjetial también recibe el nombre de cultura intrasomática. Un ejemplo de este tipo de cultura son las técnicas utilizadas por un pintor en su labor creativa. Los contenidos que pueden clasificarse dentro de la cultura subjetual responden al esquema de una especie de pautas ya que gracias a la suma de distintas acciones y operaciones, el ser humano acumula conocimiento en distintas disciplinas del saber. En cierto modo, existe un entrenamiento personal.

La cultura deja huella en el cuerpo

El cuerpo tiene un proceso de cambio después del aprendizaje asimilado por la persona, es decir, queda una huella, una memoria física. Por ejemplo, el trabajo diario de un pianista profesional deja una huella en sus manos, al igual que el arte de cantar produce un efecto en la voz.

Algunos autores prefieren utilizar el concepto subjetual en lugar de subjetivo para no vincular la cultura con lo privado, íntimo y personal.

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