Definición de Disforia de Género

Debe entenderse como el sentimiento opuesto a la euforia. Se emplea esta palabra para referirse a aquellas personas que no están satisfechas con su identidad de género. Alguien tiene disforia de género cuando su sexualidad masculina o femenina no se corresponde con su autopercepción como individuo.

En pocas palabras, cuando un hombre se sienta mujer o una mujer se siente un hombre. Como es lógico, quienes viven en esta situación se encuentran a disgusto con su sexualidad y su identidad.

Transgénero, transexual, transfobia y disforia de género

Una persona transgénero es alguien que no se identifica con el rol de género determinado por sus órganos genitales. En consecuencia, se sienta incómodo o incómoda con su asignación sexual y este desajuste le provoca disforia. Ante esta situación es bastante probable que la persona quiera alterar su rol de género llevando a término algún tratamiento hormonal o una intervención quirúrgica para cambiar sus genitales y adaptarlos a su identidad sexual (este tipo de cambios se denominan reasignación de sexo). En este caso, el individuo transgénero que tiene disforia se convierte en un transexual.

Las personas transgéneros y los transexuales no siempre son aceptados y respetados. Quienes rechazan a estos colectivos están adoptando una actitud discriminatoria, también conocida como transfobia.

Una lucha por el reconocimiento de la identidad

Desde el punto de vista de la psiquiatría, la disforia de género es considerada por algunos especialistas como una enfermedad, mientras que otros se oponen a la patologización de la disforia. El intenso sobre este asunto es abordado por la psiquiatría, la teología o la filosofía.

Para la Asociación Americana de Psiquiatría, la transexualidad y la disforia de género no forman parte de las enfermedades mentales recogidas en el manual de diagnóstico DSM-5 desde el año 2012. Así, antes de esta fecha la persona con disforia de género era un enfermo mental según los parámetros establecidos y después de esta fecha ha dejado de tener esta etiqueta. Este cambio de criterio presenta grandes semejanzas con la cuestión de la homosexualidad, ya que durante décadas la psiquiatría etiquetaba a los homosexuales como enfermos mentales y con el paso del tiempo esta consideración ha dejado de existir en la comunidad médica mayoritaria.

En 2018 la Organización Mundial de la Salud publicará el nuevo manual de enfermedades. Está previsto que la transexualidad y la disforia de género dejen de ser un trastorno mental y pasen a llamarse «incongruencias de género».

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