Definición de Efecto Coolidge

Desde que Sigmund Freud y otros psicoanalistas se interesaron por el sexo, psicólogos y antropólogos no han dejado de investigar la sexualidad humana y la de otras especies animales. El Efecto Coolidge tiene relación con varios patrones de comportamiento: la infidelidad, la falta de apetito sexual en algunas parejas, el periodo de recuperación necesario para iniciar un nuevo encuentro sexual o la adicción a la pornografía.

El curioso origen del Efecto Coolidge

Un día el presidente de Estados Unidos Calvin Coolige y su esposa se encontraban de visita en una granja de animales. En un primer momento el guía mostraba los animales a la mujer del presidente. Tras observar que gallinas y gallos copulaban con mucha frecuencia, la esposa le dijo al guía que le comunicara esta circunstancia al Sr. Coolidge.

El guía y el presidente se encontraron de nuevo en la zona de las gallinas. El guía se dirigió al presidente: «su esposa me ha pedido que le recuerde la intensa actividad sexual de gallos y gallinas». El presidente respondió con una pregunta: «¿los gallos siempre copulan con la misma gallina?» La respuesta fue rotunda: «no, señor presidente, el gallo va cambiando de gallina».

Antes de despedirse se dirigió al guía con un mensaje claro: «no se olvide de decírselo a mi esposa cuando vuelva».

La anécdota del presidente ilustra el comportamiento sexual del mundo animal y de los humanos

Psicólogos, sexólogos y zoólogos han analizado el Efecto Coolidge a partir de diversas pruebas con animales y humanos. Algunas de las conclusiones que se han extraído son las siguientes:

1) los machos de la mayoría de especies tienden a la promiscuidad sexual,

2) tanto machos como hembras se sienten atraídos sexualmente por individuos que no forman parte de su grupo natural,

3) en el caso de los humanos, un individuo puede manifestar apatía sexual con su pareja pero un gran interés por otras personas y

4) el apetito sexual disminuye progresivamente en las relaciones monógamas.

Los investigadores consideran que la clave de estas conductas asociadas al Efecto Coolidge está relacionada con la dopamina que se produce en las estructuras cerebrales. De esta manera, los niveles de esta sustancia descienden con la pareja habitual y se incrementan notablemente ante la presencia de una nueva pareja sexual.

Algunos expertos consideran que la sexualidad humana y la animal no pueden ser comparadas

Si bien los seres humanos y los animales compartimos algunas pautas de conducta, sería un error considerar que la sexualidad humana es explicable con criterios puramente biológicos.

Es innegable que tenemos inclinaciones sexuales similares a las de otras especies, pero los humanos incorporamos valores como el respeto y el compromiso.

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