Definición de Estructurado

Cuando se utiliza el término ‘estructurado’ se está hablando de un adjetivo calificativo que sirve para señalar que una cosa o persona cuenta con estructura y que por lo tanto tiene firmeza o dónde apoyarse, ya sea esto algo simbólico como concreto.

Cosa que dispone de solidez

Si usamos el adjetivo estructurado para referirnos a una persona, probablemente lo hagamos con un sentido negativo.

Persona que se comporta y piensa con rigidez le teme a los cambios y le cuesta adaptarse a lo nuevo

El término estructurado significa que la persona es muy rígida y firme en sus formas, quizás en exceso, y eso no le permite salirse de sus estructuras (que pueden ser mentales, de comportamiento, de acción, etc.).

Mientras que la vida social siempre implica la adaptación y la renovación de nuestras actitudes de acuerdo a lo que nos exige el entorno que nos rodea (sin que esto tenga que significar el abandono de nuestros ideales), una persona estructurada puede sufrir porque se aísla con sus estructuras o modos rígidos en vez de adaptarse. Ejemplo de una persona estructurada puede ser una persona que considera de gran importancia comer todos los días a las ocho de la noche en punto. Una persona desestructurada es aquella que no se preocupa por las rigideces de la vida y se permite vivir lo mejor posible dentro de lo que el medio le permite.

Principales características

Desde la psicología se define a la personalidad estructurada como aquella que dispone de estructuras mentales rígidas, cerradas, que presenta una gran dificultad a la hora de adaptarse a situaciones nuevas, a los cambios, y mucho más si los mismos están en las antípodas de su manera de pensar o de comportarse.

La vida en sociedad constantemente nos impulsa a adaptarnos a diversas circunstancias, acomodar nuestras actitudes y conductas al entorno en el que actuamos, ahora bien, sin dejar por ello de lado los ideales que nos movilizan.

En tanto, a la personalidad estructurada ante esta situación le costará arduamente hacerlo y en vez de adaptarse tenderá a aislarse. Su rigidez extrema le impide acceder al cambio y tolerarlo como sí lo puede hacer otra persona que no presenta esta inclinación.

La persona estructura decodifica al cambio como una situación desestabilizadora y amenazante ante la seguridad que experimenta y vive.

Hay un gran miedo al cambio que desencadena normalmente un grave cuadro de estrés.

Por ejemplo para la persona estructurada mudarse de casa será una situación muy desestabilizadora, que seguramente le provocará tristeza, angustia y hasta puede desembocar en el padecimiento de alguna enfermedad física.

Por otra parte, la personalidad estructurada suele caracterizarse por la prudencia, la auto exigencia, el perfeccionismo y no tolerará el desorden, la irresponsabilidad y la falta de interés en los demás.

Y en lo que respecta a cómo los demás los ven, suelen ser vistos como antipáticos, ermitaños y con cierto halo de nostalgia.
Una explicación de esto es que se concentran tanto en su universo y en lo que deben hacer que se suelen abstraer de su alrededor.

Otro rasgo habitual es que no les gusta pedir ayuda, demostrarse vulnerables, y si alguien les quiere ayudar lo rechazan.

Rara vez un estructurado saldrá de su monótona rutina de actividades y si lo hacen por algo desean regresar de inmediato porque de lo contrario el miedo las invadirá.

Cuenta con apoyo serio

Sin embargo, el término estructurado también puede aplicarse a cosas u objetos. Así, tal como se ve en la imagen, cuando algo está estructurado puede significar que tiene apoyo en algo serio o respetable, que está bien organizado o bien diagramado. El contar con una estructura es lo que permite hablar de orden y de organización, ambas cosas muy importantes a la hora de poner en claro cuestiones como conocimientos, materiales, ideas, etc. Cuando un objeto, un diagrama, un elemento no tiene una estructura más o menos clara, probablemente pierda sentido, sea difícil comprenderla o analizarla y termine perdiéndose así gran parte de sus virtudes.

Los sinónimos más empleados a instancias de este concepto son: rígido, inflexible y programado, mientras tanto, la contracara es el desestructurado.