Definición de Humanos
El término humano es otra de las tantas palabras que se utilizan en el idioma español para referirse a las personas o individuos. En términos estrictamente biológicos, los seres humanos pertenecemos a la especie animal denominada homo sapiens, adquiriendo esta denominación como consecuencia del rasgo distintivo de esta especie que es la de su capacidad de razonamiento y que lo distingue del resto que también pertenece al género homo.
Si bien es clara la similitud y el parentesco que hay entre los humanos y otros mamíferos superiores como es el caso de los monos por ejemplo, la complejidad intelectual que antes mencionaba junto a la complejidad que ostenta el organismo humano, en cada órgano, tejido, aparato y sistema hace que el ser humano sea la especie más desarrollada por donde se la mire dentro de lo que es el reino animal.
Asimismo, la plasticidad que presenta en materia de locomoción y movimiento de sus miembros también contribuye a seguir distinguiéndolo del resto, porque la infinita gama posible de los mismos que este puede practicar hace que pueda sobresalir en actividades que ningún otro homo podría, como ser actuar, bailar, practicar deportes, entre otras acciones.
En lo inherente al ciclo de vida que el ser humano posee, sin dudas, hoy en día es una de las especies más longevas que habita en el planeta tierra, pudiendo en algunos casos si se observaron correctas y saludables condiciones de vida superar los cien años de vida. Esto por supuesto pudo lograrse a través de los años y gracias a los aportes que en materia de desarrollo e investigación de enfermedades, tratamientos, prevención y calidad de vida, ha ido realizando el mismo hombre para alargar su presencia en el mundo. Esto que les digo es fácilmente comprobable dado que por ejemplo en tiempos del Imperio Humano la esperanza de vida no iba más allá de los 25 años de edad, lo cual hoy es prácticamente impensable, en la actualidad, a los 25 años, una persona recién está empezando a vivir su vida y forjando su futuro que obviamente supone muchos años más por delante.
Por otro lado, el ser humano es la única especie que en materia sexual se encuentra en celo constante, es decir, cualquier estímulo despierta en el su interés sexual, sin embargo, la capacidad de razonamiento que antes mencionábamos, el hecho de ser un ser social sometido a las influencias de la familia y la sociedad en general, hacen que ese continuo deseo sexual por el género opuesto sea a veces sublimado a través de la realización de otras actividades o simplemente a través de la represión.
Trabajo publicado en: Mar., 2009.
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