Definición de Jurisdicción

Jurisdicción es un término con distintos significados y matices. Sin embargo, hay una idea general del mismo, pues se trata de la actividad de los tribunales de justicia que tienen como objetivo la resolución de conflictos entre los ciudadanos de una manera imparcial e independiente.

El poder del estado y la idea de jurisdicción

En la mayoría de países, el poder del estado está dividido en tres instituciones: poder ejecutivo formado por el gobierno de una nación, poder legislativo formado por el conjunto de los representantes del pueblo y, por último, poder judicial. Este último se ocupa de juzgar todas aquellas posibles irregularidades que están fuera del marco legal.

Los jueces tienen la capacidad para juzgar temas penales, civiles, laborales o relacionados con conflictos familiares.

Normalmente en los textos constitucionales se establece que la jurisdicción tiene una función de carácter público y es ejercida por un juez imparcial, quien tiene que resolver algún tipo de conflicto.

Además de carácter facultativo, el planteo delimita la territorialidad de la justicia. En otras palabras, se hace alusión a las competencias de los distintos tribunales de justicia. En cada país suele haber distintas jurisdicciones y cada una de ellas tiene su propia corte de apelaciones.

Identificando la jurisdicción universal y aquella voluntaria

Al margen de los márgenes territoriales de cada nación, existe una jurisdicción universal. Ésta se aplica en los diferentes tribunales internacionales (por ejemplo, la Corte Internacional de Justicia integrada en la ONU) para juzgar delitos de lesa humanidad, terrorismo de estado, torturas o casos de genocidio. Tiene un carácter supranacional y pretende proteger a los ciudadanos de posibles abusos de poder y de los grandes crímenes contra la humanidad.

En la historia de la jurisdicción universal hay un episodio muy significativo: la detención de Pinochet en Reino Unido en 1998 por orden de un juez español en relación con los crímenes que se habían cometido durante la dictadura chilena.

El concepto de jurisdicción voluntaria se aplica en aquellos casos en los que no hay un pleito, pero se produce una petición a un juez para que este se pronuncie sobre algunas situaciones (la tutela de una persona con discapacidad mental, un previsible conflicto entre un inquilino que no paga su vivienda y el propietario de la misma o una pareja que convive en situación de concubinato).

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