Definición de Justiciero

Todo individuo tiene una idea de la justicia a partir de la cual valora desde el punto de vista moral si se respeta la verdad y si cada uno recibe lo que realmente le corresponde.

Desde la perspectiva de la ley, la figura del juez es quien debe interpretar unos hechos basándose en lo que dicen los códigos legales. Si una persona tiene un sentido estricto de la justicia y pretende que los delitos sean castigados con rigor, se puede decir de esa persona que es un justiciero.

Diferencia entre el justiciero y el juez

El justiciero tiene su propio criterio sobre lo que es justo e injusto. Su valoración personal no necesariamente coincide con lo que dictan las leyes. En cambio, el juez solamente puede atender a las leyes establecidas y no debe guiarse por su criterio personal y subjetivo.

El personaje del justiciero en la ficción

En el mundo de la ficción, especialmente en la literatura y el cine, aparece con frecuencia el personaje del justiciero. Normalmente es alguien que está insatisfecho con los mecanismos convencionales de la justicia y por este motivo siente la obligación moral de erigirse como un juez para imponer justicia donde considera que es necesario.

Normalmente este tipo de personajes actúa por dos razones: venganza y sed de justicia. Con estos dos principios adopta una posición firme y decidida para enfrentarse contra aquel que ha cometido un delito y que no ha sido castigado adecuadamente por la justicia ordinaria.

El justiciero puede ser un ciudadano corriente o un policía. Para él los procedimientos legales establecidos para combatir el mal no son eficaces. Esta convicción le lleva a actuar por su cuenta y en muchas ocasiones al margen de la ley.

Los personajes de Harry el Sucio y de Robin Hood como arquetipos de justicieros

El inspector Callahan, también conocido como «Harry el sucio», ha sido interpretado por el actor Clint Eastwood en cinco películas. A pesar de ser un policía, tiene su propio planteamiento sobre lo que es la justicia. En este sentido, considera que la ley tiene demasiadas lagunas y trabas burocráticas.

Como consecuencia de ello, los delincuentes no son castigados. Para que esto no ocurra Harry el sucio se convierte en un justiciero implacable que está dispuesto a perseguir a los delincuentes sin respetar las normas de la policía.

Si bien Harry el sucio es un símbolo del justiciero contemporáneo, ha habido otros personajes que representan el mismo concepto.

Robin Hood es otro justiciero clásico de la ficción. En este caso, el héroe medieval considera que los pobres están siendo maltratados por los avariciosos nobles y por este motivo decide robar a los nobles y repartir sus riquezas entre los pobres.

Harry el Sucio y Robin Hood son personajes que incumplen las leyes, pero a pesar de ello despiertan simpatías porque los dos tienen un alto sentido de la justicia.

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