Significado de método deductivo Definición, características y diferencia

Definición formal

El método deductivo es una guía científica que orienta sobre los procesos básicos para la apreciación de una cuestión concreta y su correspondiente resolución, marco en el cual es formulada una hipótesis para explicar el hecho u elemento, y son realizadas las pruebas necesarias para validar dicho planteo, el cual incluso puede desencadenar en nuevos interrogantes.
Derrumbar los obstáculos para alcanzar los resultados propuestos

Características del método deductivo desde la historia

La idea de método aplicada a la ciencia se empezó a desarrollar a partir del siglo XVll con la publicación del «Discurso del método» de Descartes. En el siglo XX los neopositivistas censuraron las limitaciones del método inductivo y definieron el método hipotético deductivo con más precisión. Sin embargo, este método tiene sus orígenes remotos en el razonamiento deductivo de los filósofos griegos, especialmente Aristóteles.

En el silogismo aristotélico encontramos los elementos fundamentales de esta forma de razonar. Todo silogismo se compone de tres elementos: dos premisas y una conclusión. La primera premisa es más general, mientras que la segunda es particular.

De la relación lógica que se establece entre ambas se extrae una conclusión. Para que la conclusión sea verdadera es necesario que cada una de las premisas también lo sea.

En el siguiente ejemplo observamos un silogismo válido: los planetas son redondos, la tierra es un planeta, luego la Tierra es redonda. Cuando no se respetan una serie de reglas en el proceso de razonamiento, el resultado final es una falacia, es decir, un argumento inválido.

Metodología y filosofía de la ciencia

Los avances científicos se convierten en innovaciones tecnológicas y éstas acaban influyendo en la vida cotidiana. Para comprender estos procesos se hace necesario analizar los principios que guían la actividad científica. La metodología de la ciencia es la disciplina que se centra en dicho análisis.

Como pauta general, los científicos descubren nuevos avances a través de un método. El primer paso consiste en distinguir un fenómeno, luego se presenta una pregunta relevante acerca del mismo, seguidamente se formula una hipótesis explicativa y finalmente se comprueba con un experimento la validez de la hipótesis. En el caso de confirmarse la hipótesis, se formula una conclusión en forma de ley.

El estudio del método científico en sus diferentes versiones tiene implicaciones filosóficas y como consecuencia de ello existe una disciplina específica, la filosofía de la Ciencia. En esta área del conocimiento se plantean una serie de cuestiones: el origen del conocimiento, la probabilidad de la inducción, la relación entre teoría y experiencia, el análisis del lenguaje científico o la falsabilidad de las leyes científicas.

Diferencia entre Hipótesis, ley y teoría

En el lenguaje de la ciencia estos tres términos presentan un significado distinto al que se usa en el lenguaje cotidiano. Esto se debe a que toda actividad científica está guiada por el método científico.

Una hipótesis es una proposición que establece una posible solución a un problema. Para formular una hipótesis hay que optar por una propuesta precisa, sin ambigüedad y que presente una relación directa con el asunto que se investiga. La hipótesis no es más que un camino para intentar demostrar algo.

Una ley científica es una expresión de una regularidad de la naturaleza y dicha regularidad se puede comprobar empíricamente. Así, la ley científica es el resultado del identificar una relación entre diferentes hechos concretos.

Una teoría es científica cuando permite explicar y predecir determinados aspectos de un ámbito. Mientras las leyes expresan cómo ocurre algo a través de una ecuación matemática, una teoría es un marco explicativo que engloba una serie de leyes.