Significado de tabla periódica Definición, origen, elementos y características

  • Por Eduardo Reinoso (Físico)
  • Abr./2019
  • Definición formal

    La tabla periódica, desde una primera aproximación en 1869 por el ruso Dmitri Mendeléyev, es la clasificación química constituida por 118 elementos, cuatro de los cuales fueron incorporados en 2016. Su orden está basado en el número atómico, y evidencia las respectivas características.
    Foto de la primera tabla periódica de Mendeléyev (con fecha estimada entre 1879-1886), encontrada y expuesta en la Universidad Andrews en Escocia

    Origen de los elementos químicos

    Según la teoría del Bing Bang hace miles de millones de años toda la materia y la energía existente se encontraban compactadas y tras una explosión en su núcleo se desencadenó un proceso de separación de partículas elementales en constante transformación. Con la formación de hidrógeno y helio como materia primigenia se inició la fabricación natural de los elementos.

    La expansión del universo y su consiguiente enfriamiento permitió la activación de partículas elementales (los quarks), así como la formación de protones, neutrones y electrones.

    Este proceso de transformación de los elementos fue posible por la intervención de las fuerzas principales que gobiernan el universo: gravitacional, electromagnética, nuclear fuerte y débil. En nuestro planeta existen un total de 112 elementos y la mayoría de ellos son naturales.

    Características para entender la tabla periódica

    Los elementos químicos se encuentran ordenados por grupos, los cuales están en las columnas verticales de la tabla periódica (existen un total de 18 grupos).

    Por otra parte, un periodo es una fila horizontal de la tabla (existen 7 periodos).

    Los distintos elementos con propiedades químicas similares se encuentran próximos unos de otros.

    Desde un punto de vista visual, la tabla periódica proporciona información sobre distintos aspectos. Por una parte, cada celda se corresponde con un elemento expresado con una abreviatura de una o dos letras y, además, se incluye su número atómico en la parte superior de la celda y un número en la parte inferior que expresa la masa atómica promedio de dicho elemento.

    Con respecto al número atómico, indica el número de protones situado en el núcleo del elemento químico.

    La información que proporciona la masa atómica promedio hace referencia al valor medio de los isótopos de un elemento. Los isótopos son átomos del mismo elemento que tienen en el núcleo el mismo número de protones, pero difieren en su número de neutrones.

    El número másico es un parámetro que representa la suma de los protones y neutrones en el núcleo de un átomo de un elemento.

    Según sus propiedades químicas los elementos se ordenan de la forma siguiente: gases nobles (por ejemplo, el argón o el neón), metales (por ejemplo, el oro, la plata y el hierro), no metales (hidrógeno, carbono, oxígeno y fósforo) y metaloides (arsénico, silicio o boro).

    Historia: De los cuatro elementos hasta la invención de la tabla periódica

    La comprensión de la complejidad de la materia que nos rodea se inició en la tradición de la filosofía griega. En este sentido, se afirmó que había cuatro elementos: fuego, aire, agua y tierra (Aristóteles introdujo el éter como quinto elemento, pero este se encuentra en el mundo supralunar).

    Con posterioridad, los fenómenos químicos y la comprensión de la materia se desarrollaron en una disciplina guiada por el misticismo: la alquimia.

    Los químicos del siglo XlX comenzaron a ordenar los diferentes elementos y la primera propuesta de clasificación se hizo a partir de la masa atómica (este sistema no agrupaba la materia según sus semejanzas y diferencias).

    El químico ruso Dmitri Mendeléyev demostró una cierta periodicidad en el volumen atómico de los elementos y de esta forma ideó la tabla periódica que actualmente manejamos.