Definición de Fraternización

La palabra fraternidad equivale a hermandad, es decir, el hermanamiento entre los individuos que conforman un colectivo. La fraternidad es un ideal que expresa el anhelo de convivencia entre los humanos, la buena vecindad, la colaboración y el respeto mutuo.

La idea de fraternidad está asociada al altruismo que, a su vez, se opone al egoísmo. Por otra parte, este sentimiento tiene una estrecha relación con otros: la solidaridad, la caridad o la piedad.

La mayoría de religiones abogan por la fraternidad entre los seres humanos. Esta aspiración la encontramos entre los católicos, los protestantes, el hinduismo o el islam. Desde la óptica política, algunas ideologías propugnan la fraternidad entre los miembros de la sociedad (por ejemplo, el socialismo). Por otra parte, hay que recordar que el lema de la República francesa es precisamente «liberté, égalité, fraternité».

La idea de fraternidad lleva implícita un mensaje: que a pesar de nuestras diferencias personales, sociales, políticas o religiosas es posible que tengamos una convivencia armónica y conciliadora.

La empatía hacia los otros

El sufijo ción aporta a una palabra un significado de movimiento y cambio. Así, el verbo imitar se convierte en imitación u organizar en organización. Lo mismo sucede con fraternidad y fraternización. De esta manera, la fraternización sería el proceso por el cual nos acercamos a los demás con un sentimiento de empatía y buena predisposición.

La otra cara de la fraternización

El concepto de fraternización comunica ideas positivas y, en principio, no tendría sentido que alguien dijera que se opone a este ideal. Sin embargo, en algunas circunstancias la fraternización puede ser problemática. Veamos algunos casos:

1) un jefe es un buen amigo de sus empleados y como consecuencia de ello tiene dificultades a la hora de imponer ciertas normas o de exigir responsabilidades,

2) un profesor tiene una excelente relación personal con sus alumnos pero éstos interpretan que la buena sintonía debe traducirse en mejores calificaciones, pues los buenos amigos se hacen favores.

Estos dos ejemplos ponen de relieve la paradoja de la fraternización, pues se trata de una idea noble pero que debe interpretarse y contextualizarse correctamente.

El origen de la palabra

Fraternidad viene del latín fraternitas, que significa cualidad propia de hermanos. Sin embargo, este término tiene un origen histórico muy concreto, las fratrias de la antigua Grecia. Las fatrias eran unas formas de asociación de un pueblo, algo similar a un clan. De esta manera un conjunto de fratrias eran conocidas como gene (genos en plural), que se podría traducir como linaje o estirpe.

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