Definición de Historicidad

Calidad de histórico

Se designa con el término de historicidad a toda cuestión, cosa o persona que presenta calidad de histórico, es decir, que es relativo o parte de la historia.

La historia, en tanto, es aquella ciencia social que tiene por objeto estudiar el pasado de la humanidad.
El objeto de estudio de la historia no es otra cosa que aquellos sucesos acontecidos en el pasado. Los historiadores que son aquellos profesionales idóneos en la materia son los encargados de investigar un período de tiempo específico y sobre él analizarán toda la información que haya disponible, esto es archivos, testimonios en primera persona, documentos, en definitivas cuentas, se pondrá el foco sobre todo aquello que permita un conocimiento acabado de la época en estudio.

De entre todas las ciencias humanas, es decir que se ocupan de la acción del hombre, la historia es sin dudas una de las más relevantes y útiles para el propio hombre porque no solamente permite conocer el conjunto cultural y material de una sociedad determinada que ha pasado por la historia sino que también nos permite reconstruir nuestra identidad cultural, analizando, investigando y recapturando información del pasado que facilite la reconstrucción de la idiosincrasia.

Reflexiona sobre los acontecimientos sucedidos

Volviendo al concepto que nos ocupa y en un sentido estricto, la historicidad implicará la interpretación de la temporalidad, que es la característica de los hechos ya sucedidos que ocurren en el transcurso del tiempo, de los hechos pasados.
Entonces, la historicidad sería algo así como la reflexión sobre la temporalidad de los hechos acontecidos, siendo la misma propia y exclusiva de los seres humanos, porque solo los hombres están capacitados para reflexionar acerca del tiempo y de su paso. Esta cuestión supone, que si la historia son en efecto los hechos interpretados y se dice que la misma es relativa, también la interpretación de la misma, o sea la historicidad, lo será.

También la historicidad implica tomar en consideración que toda la actividad que lleva a cabo el ser humano integra la historia, forma parte de esta disciplina, independientemente de lo que se trate, todo lo que hacemos las personas integra la historia y más adelante nos permitirá reflexionar sobre ello al repasarlo a través de los documentos históricos, entre otras fuentes.

Mientras tanto a la historicidad lo que más le interesa es la reflexión sobre la mismísima historia, no tanto qué cosas sucedieron, que de las mismas se ocupa la propia historia, sino el quit de la cuestión está en el análisis de la historia misma.
Y la característica que capta el foco de atención durante ese análisis es la temporalidad, porque el tiempo es clave a la hora de comprender la historia.

Elementos que componen la historicidad

En la historicidad se pueden detectar tres elementos fundamentales: espíritu encarnado, temporalidad y libertad.

Por ser espíritu, el hombre se encuentra abierto al horizonte ilimitado que le propone ser un ser, la posibilidad de trascender a lo finito e incluso a sí mismo, en tanto, por ser a su vez espíritu encarnado, es decir, espíritu dentro de un cuerpo material, también es finito y limitado, no agotando las posibilidades de la esencia.

La temporalidad en este sentido no implicará la duración de su existencia como ente sino más bien el despliegue intrínseco a la hora de la realización de sus posibilidades, las cuales, se caracterizan por ser transitorias, ordenadas y con el destino de en algún momento dado ser sustituidas por otras y así sucesivamente.

Y la Libertad, porque el hecho de poder actuar libremente es lo que en cierta manera le da ese carácter de histórico al hombre. Únicamente donde hay libertad habrá historicidad.