Definición de Prohibición

Una prohibición es el impedimento que existe de hacer, tocar, hacer o usar algo porque implica riesgos a la vida y la manipulación sin conocimiento puede provocar serios daños, o porque existe una ley que lo restringe.

Veto que se impone para hacer, usar o tocar algo y que está sustentado en una norma, ley o en el consenso social

Tal veto puede estar respaldado por una ley, norma, o reglamentación, o bien puede no estar escrito pero disponer de un respaldo y respeto social.

Por ejemplo, en este último caso podríamos citar a aquellas personas con mascotas que las sacan pasear en plazas o calles y no levantan las heces; en algunos países existen multas pero en otros no, ahora bien, esta situación se considera prohibida, es decir, el dueño de la mascota debe remover las heces de su perro y descartarlas en un lugar correspondiente como el cesto de basura.

Existe una convención y un respeto en este caso que algunos cumplen a rajatabla y otros no, en tanto, ese consenso respecto que está mal, es antihigiénico y contrario a la buena convivencia no levantar las heces de una mascota, permite y habilita a que cualquier persona puede llamarle la atención a ese individuo descuidado que no lo hace.

Evitar el caos y promover la armonía social

Entonces, el cometido de la prohibición es disponer limitaciones en la realización de determinadas acciones para así evitar el caos y conseguir una convivencia armoniosa entre las personas que componen una comunidad, porque si todos podríamos realizar lo que queremos en cualquier lugar sería un problema ya que no todos los individuos somos iguales y seguramente lo que para alguien está bien, es correcto, para otro puede no serlo, puede además molestarlo y hasta interferir con sus derechos básicos.

Por ejemplo, pintar las paredes de un edificio, de un negocio, suele ser una práctica habitual de muchas personas o grupos, sin embargo, ello no está bien porque afecta y daña la propiedad privada de algunas personas.

Por caso, es que en muchas partes del mundo existe una norma que castiga justamente esa acción.

En los lugares públicos es donde mayormente nos podremos encontrar con las prohibiciones, ya que al tratarse de lugares que son visitados o transitados por una gran cantidad y todo tipo de personas es preciso, para lograr el orden y evitar excesos, que existan prohibiciones concretas, escritas y expuestas para que la gente las respete.

Entre los más comunes nos encontramos con la prohibición de fumar, con la prohibición de paso a determinadas áreas restringidas, la prohibición de estacionar en entradas y salidas de garajes, en las esquinas donde hay rampas para discapacitados, entre otras.

En los lugares públicos o privados en los que existen áreas peligrosas porque se desarrollan tareas sensibles, o porque se manipulan sustancias tóxicas, suele estar vedado el ingreso de cualquier persona ajena a esas tareas.

Carteles y avisos para advertir al público lo que se prohíbe

Así es corriente apreciar tales avisos en sanatorios u hospitales, por ejemplo, en laboratorios o en sectores destinados a la cirugía o a la atención de enfermos graves.

Siempre este tipo de prohibiciones son avisadas al público en general a través de carteles que marcan la correspondiente prohibición; suelen avisarlo con imágenes, símbolos y palabras concisas, en colores rojos y negros, destacados para qué nadie pueda no advertirlos.

Por otro lado, en los últimos años con las importantes y masivas campañas que se vienen realizando respecto de los daños que ocasiona el cigarrillo, tanto para el propio fumador como para los que que aspiran el humo de manera pasiva, ha generado que hoy este prácticamente prohibido fumar en casi todos los espacios públicos y privados donde concurre público importante: oficinas, grandes empresas, bares, restaurants, entre otros.

Esta medida es sin dudas un avance en materia de salud pública.

Orden que un juez dicta para que una persona no se acerque a otra o a un lugar

Cabe destacarse que asimismo se puede librar una prohibición contra alguna persona para que se acerque a otra, en caso que la misma represente un peligro para su vida o su salud.

Comúnmente la dicta un juez o tribunal de justicia.

Si bien las prohibiciones en muchos casos no evitan que se produzcan hechos como los mencionados, porque hay individuos que no respetan ni siquiera las normas, lo que sí hace la prohibición es ordenar un poco la vida en comunidad y desalentar a aquellos que por desconocimiento pretenden transgredir algunas de las prohibiciones vigentes.

El concepto que se contrapone al que nos ocupa es el de permiso ya que refiere el consentimiento, la autorización para hacer, decir o usar algo.