Significado de pseudociencia Definición, clasificación y ejemplos

Definición formal
Pseudociencia refiere a una postura que pretende manifestarse a nivel científico, pero que no ha sido constatada como tal.
La etimología, del latín, explica el escenario de una ciencia cuestionable, a partir del sufijo seudo- que describe falsedad, y scientia, que plantea conocimiento procedente de su forma verbal scire y sobre la cual profundizando la deconstrucción particular se aprecian los componentes -nt- e -ia pautan una acción y una cualidad respectivamente.
Clasificación de las pseudociencias
El mundo de las pseudociencias abarca áreas y disciplinas de todo tipo. Esta diversidad hace que sea conveniente una cierta clasificación. En el terreno de la espiritualidad y de las creencias algunas de las más conocidas son las siguientes: dianética, fisiognomia, numerología o ufología. Entre las técnicas de adivinación destacan la quiromancia, la hidromancia o la cartomancia. Un apartado muy amplio tiene relación con las pseudoterapias médicas.
Con respecto a su clasificación, se podría hablar de dos categorías: aquellas que no hacen ningún daño a sus seguidores (por ejemplo, la astrología) y las que tienen un potencial altamente dañino, como las que curan enfermedades mortales.
Al margen de las distintas formas de clasificación, hay una cuestión evidente: estas disciplinas pueden ser hábilmente empleadas por timadores profesionales.
Las pseudoterapias como peligro para la salud
Las disciplinas pseudocientíficas y las modas que contradicen a la comunidad científica son especialmente dañinas cuando está en juego la salud. Algunas personas recelan de la medicina convencional y en su afán por mejorar su estado de su salud buscan soluciones supuestamente fiables.
En los últimos años se ha popularizado un amplio abanico de soluciones que, si bien pueden traer beneficios, no son una respuesta mágica: dietas anticáncer, homeopatía, Flores de Bach, Reiki… Todas ellas se basan en promesas esperanzadoras y alejan a los pacientes de las terapias convencionales.
Algunos gobiernos intentan combatir su proliferación y promueven campañas para desacreditar a las pseudoterapias y, al mismo tiempo, para alertar a la población sobre sus peligros.
Fenómeno con múltiples causas
Las explicaciones pseudocientíficas no obedecen a una única causa. De hecho, se trata de un fenómeno multifactorial.
El ser humano necesita respuestas a sus inquietudes o necesidades y cuando la ciencia no resuelve sus dudas es muy probable que busque soluciones en otras alternativas.
Las propuestas acientíficas o pseudocientíficas suelen ser atractivas, ya que aportan soluciones donde hay dudas e incertidumbres. Por ejemplo, la intervención de los extrarrestres en la construcción de las pirámides es una teoría mucho más atractiva que cualquier novela fantástica.
El conocimiento científico puede ser muy complejo y debido a ello algunas personas prefieren el camino fácil de otros saberes.
Ante una situación de enfermedad irreversible es comprensible la búsqueda de soluciones esperanzadoras.
Desde el terreno del razonamiento, con mucha frecuencia manejamos el argumento ad ignorantiam. Se trata de una falacia que consiste en defender una idea afirmando que no existen pruebas que demuestren lo contrario (esta forma de razonamiento falaz es aplicable a la mayoría de principios defendidos en las pseudociencias).
Por último, el ser humano tiene una inclinación natural hacia lo irracional o lo mágico. Esta tendencia milenaria nos ayuda a comprender la afición por los saberes ajenos a la ciencia.

