Definición de Beligerante

Existen distintos tipos de actitudes que a nivel humano, muestran una predisposición determinada en la persona. Una persona beligerante es aquella que está en actitud hacia la guerra. Beligerante es un adjetivo que muestra la agresividad o situación de defensa de un estado o persona que está en disposición de guerra. Por tanto, se trata de una relación en la que se establece una posición de lucha entre distintos elemenetos.

Beligerante es un concepto que procede del latín, en concreto, se formó a partir del sustantivo bellum, belli que significa guerra.

Beligerante como una personalidad confrontativa

Desde otro punto de vista, una persona beligerante también puede ser una persona combatiba que tiene una tendencia especial hacia la polémica. Existen algunos conceptos que son sinónimos de beligerante y que pueden utilizarse en el mismo contexto semántico. A continuación mostramos una lista de conceptos sinónimos: oponente, rival, contrario en la batalla, conflictivo. El contexto de la guerra que remite a la lucha está vinculado con el sufrimiento, el dolor y la pérdida. Por ello, la paz es un pilar esencial en una vida feliz. La paz es un concepto tan esencial que no solo podemos hablar de paz social sino también, de paz interior, es decir, de tranquilidad anímica.

Una manifestación de pasión por algo en lo que se cree

Más allá del contexto de la guerra, el término beligerante también puede ser utilizado por asociación de ideas en otros contextos más cotidianos, por ejemplo, para remitir al modo de ser de una persona. Una persona puede ser beligerante cuando defiende sus ideas con mucha vehemencia puesto que es una persona apasionada que cree de verdad aquello que defiende. De este modo, lucha por la verdad de sus ideas y no se coloca en el rol de espectador sino que actúa como protagonista de su propia vida. Son personas que transmiten mucha fuerza.

En su percepción más negativa

Sin embargo, la actitud de ser beligerante que puede ser muy positiva en cuanto a la pasión que existe detrás de esa posición también tiene aspectos más negativos como se muestra en el caso de aquellas personas que son conflictivas en los hechos. Una persona beligerante también puede ser altiva y soberbia en su trato hacia los demás, hasta el punto de que puede colocarse en rol de superioridad. Además, realiza afirmaciones como si fuesen verdades absolutas.