Definición de Consulta Popular

En la polis de Atenas en el siglo V a. C se estableció una nueva forma de gobierno, la democracia. Los ciudadanos atenienses tenían mecanismos de participación en la vida política y las decisiones que tomaban en las asambleas determinaban el rumbo político de la comunidad.

A partir de la Revolución Francesa la democracia se afianzó como forma de gobierno y de manera paulatina las naciones desarrollaron un sistema de gobierno de representación popular.

Las consultas populares se plantean como un nuevo avance dentro del sistema de democracia representativa

En el modelo democrático convencional los ciudadanos son convocados a las urnas de manera periódica para elegir a sus representantes municipales, regionales o estatales. Algunos analistas y politólogos consideran que este sistema puede ser mejorado, ya que la ciudadanía no siempre se identifica con sus representantes. El mecanismo que se propone para potenciar la participación del pueblo en la actividad política es la consulta popular.

La idea fundamental de toda consulta popular es sencilla. Así, un conjunto de ciudadanos plantea una propuesta a partir de un número determinado de firmas de apoyo a la idea originaria y una vez obtenidas se organiza una votación sobre el asunto planteado. De esta manera, el pueblo se manifiesta sobre cuestiones de toda índole: los presupuestos de la comunidad, temas de seguridad, obras públicas, desarrollo industrial de una zona, etc.

Suiza es el país con más tradición en consultas populares

En Suiza hay un sistema parlamentario convencional y, de manera paralela, los ciudadanos votan en relación con todo tipo de iniciativas populares.

En los últimos años los suizos han votado a nivel estatal sobre los siguientes asuntos: la ampliación del periodo vacacional, el mantenimiento del servicio militar obligatorio o el nivel de impuestos relacionados con algunos servicios públicos.

El modelo de consulta popular tiene ventajas e inconvenientes

Su principal ventaja es evidente: se incentiva la participación y de esta manera el pueblo interviene directamente y sin intermediarios en todo aquello que tenga relación con sus intereses.

Una consulta popular también puede ser tergiversada por políticos populistas que manipulen al pueblo. En este sentido, es interesante recordar que la mayoría de filósofos atenienses no aprobaron el modelo democrático impuesto por Pericles, pues consideraban que el nuevo sistema era beneficioso para los intereses de los demagogos.

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