Definición de Enfermedades Respiratorias

Las enfermedades respiratorias son aquellas que afectan a las diversas estructuras que conforman el aparato respiratorio.

Estas enfermedades pueden afectar a la nariz, senos paranasales, laringe, tráquea, bronquios, pulmones o la pleura.

Su naturaleza es variable. Las enfermedades respiratorias más comunes son aquellas de tipo infeccioso y alérgico, sin embargo pueden existir también malformaciones congénitas, defectos adquiridos, enfermedades degenerativas y malignas.

Las enfermedades respiratorias son más comunes en los niños

Los niños suelen estar afectados con frecuencia por enfermedades de tipo respiratorios. Esto se relaciona con dos hechos principales.

Por una parte la vía aérea es una fuente de microorganismos que pueden ser inhalados del aire e ingresar al cuerpo para ocasionar un proceso infeccioso, en especial en el caso de los niños que al tener un sistema inmune inmaduro no cuentan con los anticuerpos que le ayuden a combatir estas infecciones. Por otro lado muchas partículas en el ambiente pueden ingresar también al aparato respiratorio ocasionando alergias.

Principales síntomas asociados a las enfermedades respiratorias

Estas enfermedades ocasionan síntomas como la congestión y obstrucción nasal, presencia de mocos y secreciones, estornudos, dolor de garganta, cambios en la voz como la ronquera, tos, dificultar para respirar y dolor en el pecho con el costado.

También es posible que ocurran síntomas generales, es decir, que abarquen a estructuras fuera del aparato respiratorio. El principal síntoma general que acompaña a estas enfermedades es la fiebre, aunque pueden presentarse también el malestar general, falta de apetito e insomnio.

Tipos más frecuentes de infecciones respiratorias

Infección respiratoria alta. Se conoce como infección respiratoria alta a la afección de la nariz, senos paranasales y laringe, también se incluyen en esta clasificación las infecciones de los oídos. Su principal causa es el resfriado común, ocasionado por virus como la influenza. También puede hacer infecciones por bacterias, estas suelen localizarse principalmente a nivel de los oídos y los senos paranasales. Las infecciones respiratorias altas incluyen la rinitis, sinusitis, rinosinusitis, otitis, y laringitis.

Infección respiratoria baja. Abarca las infecciones de la tráquea, bronquios y los pulmones. Estas infecciones pueden ser debidas a cualquier tipo de microorganismo, siendo más comunes los virus. Aquí se incluyen la traqueobronquitis, bronquitis, bronconeumonía y neumonía.

Alergias respiratorias. Muchas veces las alérgicas son confundidas con condiciones como el resfriado común. Estas se caracterizan por producir congestión, aunque su principal manifestación son los estornudos, picazón en los ojos y la nariz.

Enfermedades obstructivas de la vía aérea. Corresponden al asma bronquial, el enfisema pulmonar y la enfermedad pulmonar obstructiva crónica. Ambas condiciones generan constricciones en los bronquios afectando el paso del aire a través de ellos, por lo que este queda atrapado acompañándose de una importante sensación de dificultad respiratoria.

Enfermedades restrictivas. Son condiciones en las que hay alteraciones de la membrana que envuelve a los pulmones, conocida como pleura, o los elementos que forma la caja torácica. Estas afectan la capacidad de expansión de los pulmones por lo que disminuyen la ventilación. Aquí se incluyen las artritis y deformidades de la columna vertebral y enfermedades inmunológicas que afectan a la piel como la esclerodermia.

Enfermedades malignas. Las diversas estructuras del aparato respiratorio pueden ser asiento de enfermedades malignas como el cáncer. Este se ubica con mayor frecuencia en los pulmones, estando muy relacionado con antecedentes como el hábito de fumar cigarrillos. Los pulmones también pueden verse afectado por metástasis de tumores ubicados en otros órganos.

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