Definición de Hora Mágica

El concepto de hora mágica no tiene nada que ver con fenómenos paranormales o con relatos de hadas. En realidad es una denominación que emplean los fotógrafos y cineastas para referirse a dos momentos especiales durante el día: el breve momento anterior al amanecer y cuando el Sol se pone antes de que llegue la noche. Por lo tanto, estrictamente hablando hay dos horas mágicas y en realidad no son dos horas exactas, ya que su duración es inferior a los 60 minutos.

¿Por qué es relevante la hora mágica para los fotógrafos y cineastas?

Durante este breve periodo de tiempo se producen unas condiciones de luminosidad óptimas para estos profesionales. Las características de la luz permiten captar imágenes con una tonalidad dorada y con una intensidad singular que no se encuentra en otros momentos del día. En este sentido, la hora mágica (llamada a veces hora dorada) es idónea para buscar imágenes al aire libre o escenas urbanas. Los entendidos afirman que los tonos rojos no son adecuados en las imágenes, ya que se transforman en marrón por el efecto luminoso.

Las imágenes recogidas en la hora mágica resultan sugerentes porque trasmiten sensaciones e ideas sutiles: una atmósfera melancólica, un cierto esplendor, un toque de calidez, una peculiar belleza, así como la visión del tiempo como algo fugaz. Y todo ello acompañado de una idea implícita y misteriosa: la presencia del silencio. Estos componentes convierten a la hora mágica en una dimensión temporal fascinante que permite sugerir emociones intensas al observador.

Significado de las horas del día

Desde el punto de la vista de la astrología la hora exacta en la que nacemos tiene consecuencias en nuestro destino como individuos. Desde la perspectiva de la numerología, ciertas horas son señales de tipo espiritual (por ejemplo, las 11:11).

Desde un planteamiento puramente subjetivo, cada persona tiene su «hora mágica», es decir, el momento del día en el que se siente mejor. En este sentido, los biorritmos de algunas personas son diurnos y tienen más energía al amanecer, mientras que otros se sienten mejor durante la noche (los primeros son llamados alondras y los segundos lechuzas, ya que estas aves son diurnas y nocturnas de manera respectiva).

Las horas del día están asociadas a ideas diversas: para los anglosajones de las 9 a las 17 horas se está indicando la duración de la jornada laboral, las 11 puede ser la hora del café durante el trabajo, hay unas horas determinadas para las comidas en cada cultura y también hay horas intempestivas en las que es inadecuado llamar por teléfono a alguien.

Fotos: Fotolia – Netfalls / Ninelutsk