Definición de Subjetivismo

La palabra subjetivismo se emplea cuando se quiere dar cuenta de la existencia de un predominio de lo subjetivo en el área que corresponda.

Preponderancia de la subjetividad en los juicios y conocimiento de una persona que hace que pese más sus ideas y experiencias

El concepto de subjetivo se encuentra muy presente en nuestra lengua dado que se trata de una cuestión muy corriente en la vida de los seres humanos, en sus opiniones especialmente.

En lo subjetivo siempre predominará la valoración personal de cada individuo y se opone al concepto de objetivo, ya que este está asociado al objeto, al cual se lo aprecia libre de juicios personales, o sea, se contempla el objeto fuera de influencias personales.

Siempre el conocimiento subjetivo estará plagado de valoraciones personales, sentimientos, y de ideologías que prevalecen en el sujeto y no en el objeto y además la subjetividad estará influida por el medio sociocultural al que pertenece la persona.

Todo ello combinado cargará a la persona y no le permitirá muchas veces ver o conocer al objeto desprovisto de todo eso.

No podemos soslayar que la subjetividad siempre se asocia a la parcialidad mientras que lo objetivo dispone de una valoración de indiscutible y parcial.

Doctrina filosófica que solamente da como válido lo que el sujeto dice conocer

También, se denomina subjetivismo a aquella doctrina filosófica que limita la validez del conocimiento al sujeto que conoce, es decir, el subjetivismo es una postura que toma como cuestión primaria para cualquier verdad, o en su defecto moralidad, a la individualidad psíquica y material de un sujeto determinado, la cual se concibe como siempre variable e imposible de llegar a convertirse jamás en una verdad absoluta y universal.

En el subjetivismo la validez de un pensamiento se limita al sujeto en cuestión que conoce o juzga y lo hace principalmente de acuerdo a su entendimiento y en estrecha vinculación a la realidad que le toca vivir, o sea, a su entorno, a la interacción social que mantiene con otros sujetos.

Las interpretaciones que una persona realiza sobre cualquier aspecto solo serán accesibles para la persona que las experimenta, dado que una misma experiencia puede ser vivida de modo distinto por cada individuo como consecuencia de las diferentes realidades que poseen.

Por su lado el subjetivismo ético o subjetivismo moral, como también se lo conoce, es una doctrina de tipo ético filosófica que sostiene que lo bueno y lo malo en la moral es reducible a nuestras actitudes y opiniones personales, o sea, si yo creo que tal cosa es buena, entonces, esa tal cosa en mis manos será buena para mí. David Hume, filósofo, economista e historiador de origen escocés ,que vivió entre los años 1711 y 1776, está reconocido como uno de los exponentes más destacados del subjetivismo ético.

Desde sus comienzos, la filosofía se ha cuestionado sobre este tema y fueron los principales filósofos de la Grecia clásica los que lo han hecho, desde Platón, pasando por Sócrates y Aristóteles, y todos los que siguieron, en tanto, todos han hecho referencia a la limitación que propone la subjetividad.

Una postura que limita al hombre

Porque la visión subjetiva, que está cargada de nuestras opiniones personales, experiencias y valoraciones estará justamente plagada e influida por estas y puede no dejarnos ver “limpiamente” algo.

Por caso es que a veces es necesario apelar a otros, que nos acerquen una mirada objetiva de las cuestiones y de las personas, más que nada cuando resulta ser necesario tomar decisiones cruciales, porque si estamos imbuidos en los que pensamos nosotros podemos dejar de ver algunas cuestiones importantes de considerar.

Conducta que sostiene que la realidad se crea en la mentalidad de la persona
Y el otro uso recurrente de la palabra subjetivismo permite dar cuenta de aquella actitud que defiende que la realidad es creada en la mente del individuo.