Qué es Acracia

En español hay muchas palabras con el sufijo cracia, como democracia, teocracia, aristocracia, socialdemocracia, plutocracia o gerontocracia. En todas ellas este sufijo hace referencia a una forma de gobierno o un sistema político. Sin embargo, el término acracia designa el no gobierno, ya que esta palabra quiere decir literalmente sin gobierno o sin estado.

Las propuestas de acracia y anarquía son equivalentes

Desde las filas anarquistas se han defendido y se defienden propuestas contrarias a los sistemas políticos convencionales. Los anarquistas son ácratas porque consideran que la organización social y el poder en sus diferentes versiones no deben ir en contra de la libertad individual.

El ideario ácrata no es uniforme, pero a lo largo de la historia ha presentado algunos rasgos generales. La libertad es el valor supremo y debe regir a los individuos y a los pueblos, pues ningún gobierno tiene la legitimidad moral para ejercer presión. Por otro lado, hay una oposición a cualquier forma de autoridad (los anarquistas entienden que aquellos que ejercen el poder acaban siendo autoritarios). Se reivindica el autogobierno como forma de gestión alternativa. Esta corriente filosófica y política propugna la convivencia en comunidades de individuos libres y sin ningún tipo de estructura jerárquica.

Aquellos que se oponen a los gobiernos tradicionales desde la visión anarquista también desaprueban el papel del estado. En esta corriente de pensamiento se defiende la socialización de los medios de producción, pero sin ninguna intervención estatal (comunismo y anarquismo son dos propuestas con una dimensión social compartida pero los anarquistas rechazan la dictadura del proletariado y el papel del estado).

La solidaridad, la igualdad y el apoyo mutuo son igualmente principios fundamentales del movimiento ácrata.

El espíritu antiautoritario

Los anarquistas se definen a sí mismos como ácratas o como libertarios. Más allá de las etiquetas, en todos ellos hay un espíritu de rebeldía. En ocasiones este movimiento ha expresado sus convicciones utilizando medios violentos (un sector de los anarquistas protagonizaron acciones terroristas para oponerse al capitalismo y a la burguesía). Otro sector del movimiento rechaza cualquier forma de violencia y se declara pacifista reivindicando una no violencia activa.

Una versión singular es el anarcocapitalismo, una corriente política que defiende la combinación de tres tendencias: la abolición del estado, la soberanía del individuo frente a la soberanía nacional y la gestión privada de corte capitalista.

En todas las modalidades ácratas o libertarias hay un denominador común: una actitud vital contraria a la autoridad en cualquiera de sus formas. Para un ácrata todo individuo es dueño de sí mismo y no es aceptable que otra persona tenga poder o autoridad sobre nadie.

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