Definición de Ayudar

La palabra ayudar es el término que nos permite expresar la colaboración o la cooperación que alguien realiza a instancias de una determinada actividad o que se le brinda a un individuo en el marco de una actividad o tarea que está desplegando, o en una situación apremiante que está viviendo, ya sea económica o emocional.

Colaboración que alguien le brinda a otro

“ Laura me ayudó a acomodar la casa tras la mudanza. Estamos ayudando a Juan en un evento que organizó a beneficio del club de su barrio.”

Auxilio

Por otro lado, la palabra ayudar también es empleada como sinónimo de auxiliar y de socorrer a alguien que se halla inmerso en una situación de emergencia o delicada.

Puede aplicarse en relación a entidades u organizaciones, es decir, si sucedió un terremoto en un país, entonces, diferentes organismos y naciones le prestan ayuda al país afectado enviándole provisiones de indumentaria, alimentos, remedios, entre otras cuestiones.

Y asimismo podemos usar la palabra con respecto a individuos que se encuentran atravesando un momento difícil, por ejemplo, por la pérdida del empleo, y se lo ayuda con dinero y comida para que pueda subsistir hasta que halle empleo nuevamente.

En cualquiera de los casos que hemos mencionado, alguien dispone de un elemento o recurso que se lo entrega a otro de manera voluntaria y con un fin solidario, de asistirlo y de colaboración, por caso la ayuda siempre implica dos partes, una que ostenta ese recurso y la otra que lo necesita y que obviamente lo recibirá con ansias, porque lo salvará de la situación en la que se encuentra.

Aquello que se emplea como apoyo

Y también a partir de la palabra ayuda se puede expresar a aquello o a aquel que alguien usa para apoyarse. “Mi abuela usa un andador para poder movilizarse dentro la casa ya que tras la operación su movilidad propia quedó reducida.”

Cabe destacarse que la palabra ayudar presenta una notable variedad de sinónimos entre los que sobresalen: auxiliar, socorrer, asistir,….

Mientras tanto se opone a conceptos como los de abandonar, desasistir y desamparar, que por supuesto implican lo opuesto: abandonar a su suerte a aquel necesita ayuda en alguna cuestión.

La acción de ayudar se haya además en estrecha vinculación con conceptos como el de solidaridad y humanidad, ya que indefectiblemente quien se inclina por ayudar al otro que lo necesita observará estas características en su personalidad, demostrando una sensibilidad especial a favor de aquel que necesita una mano.

Organizaciones sin fines de lucro, en el centro de la ayuda social

No podemos soslayar al abordar este tema el gran trabajo que realizan en todo el mundo organizaciones no gubernamentales, las famosas ONG, las fundaciones u organizaciones civiles sin ningún ánimo de lucro, y que centralizan recursos que luego derivan a aquellas personas o territorios que los necesitan, es decir, se ocupan personalmente ellos, a través de sus equipos y colaboradores, de hacerles llegar la ayuda, usan su propia logística, excepto que la magnitud exceda sus posibilidades pueden requerir la asistencia del estado, pero normalmente lo hacen per se.

El nacimiento de estas organizaciones siempre tiene como punto en común la reunión de varias personas que han sufrido una tragedia o que empatizan con diversas causas sociales y entonces deciden juntarse para atender y darles soluciones a aquellas personas o grupos vulnerables que las necesitan para salir de una situación conflictiva, de un problema sanitario, de falta de vivienda, entre otros.

Afortunadamente hay muchísima gente en todo el planeta que tiene una tremenda conciencia social más allá de si les sobran o no recursos propios, y deciden invertir parte de su tiempo en trabajar para este tipo de organizaciones.

Ahora bien, no podemos pasar por alto también la responsabilidad que el estado tiene en materia de asistencia y ayuda a aquellas personas que se encuentran en situaciones de pobreza y marginalidad, porque lamentablemente, en muchos países sub desarrollados, esta termina siendo una realidad constante, los estados cooptados por la corrupción de sus dirigentes no pueden hacer frente a estas problemáticas, porque el dinero público se lo han robado, y son las ONG las que terminan asumiendo el rol del estado.