Definición de Buen Juicio

El concepto de buen juicio se refiere a nuestra capacidad de juzgar adecuadamente. En este sentido, el concepto que analizamos hace alusión a la idea de justicia. En otros términos, se trata de tener un criterio racional y moral para discernir correctamente sobre el bien y el mal, lo correcto y lo incorrecto.

La toma de decisiones y el buen juicio

No tenemos más remedio que tomar decisiones sobre todo tipo de asuntos. La decisión que adoptemos será correcta si se basa en un criterio sensato y razonable desde el punto de vista moral y de nuestros intereses personales. Hay que tener en cuenta que ante muchas decisiones nos enfrentamos a un dilema: actuar según un criterio justo o hacer aquello que nos beneficie.

Si actúo con un criterio de justicia puedo perjudicarme y si defiendo solamente mis intereses puedo actuar de manera injusta. El buen juicio viene a ser la reflexión individual por la que valoramos nuestras decisiones buscando el correcto equilibrio entre lo justo y el propio beneficio.

Pautas para tener un buen juicio

Las religiones presentan una serie de propuestas que sirven como referencia para que sus seguidores actúen con buen juicio (por ejemplo, las bienaventuranzas del cristianismo o el respeto a todos los seres vivos que propugna el budismo). Por otra parte, en las teorías éticas hay argumentos que permiten establecer criterios morales válidos. Al margen de las propuestas religiosas o filosóficas, para adquirir un buen juicio resultan útiles algunas pautas generales:

1) la formación en valores como el respeto, la sinceridad o la responsabilidad individual,

2) el recurso a algún tipo de criterio moral (por ejemplo, el imperativo categórico kantiano),

3) el conocimiento de las reglas y los códigos que rigen la vida en sociedad (en el ámbito del derecho, de las normas sociales, etc.),

4) el ejemplo de quienes actúan con un afán de justicia en su vida personal y

5) la reflexión como hábito antes de la toma de decisiones.

Estas pautas pueden servir para colaborar en la formación de un buen juicio.

¿En qué consiste el mal juicio?

Decimos que alguien tiene un mal juicio cuando actúa de manera insensata, en contra de los valores morales establecidos, sin sentido común, de forma irreflexible e impetuosa, con un espíritu egoísta y sin un criterio moral.

El juicio es una facultad del alma humana que nos permite elegir entre lo que es correcto o no, entre lo verdadero frente a lo falso. Tenemos un juicio como individuos porque actuamos racionalmente y según unos valores morales. Los animales carecen de esta facultad, pues sus acciones están dominadas por sus instintos.

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