Definición de Derechos del Animal

Desde la civilización romana se considera que los seres humanos tienen derechos. A lo largo de la historia se han ido conquistando de manera paulatina una serie de derechos y en este sentido existe la Declaración Universal de los Derechos Humanos, un documento de referencia según el cual todas las personas tienen una serie de derechos reconocidos, tales como el de la libertad de expresión, el de un trabajo digno, el derecho a la propiedad, el de practicar libremente unas creencias religiosas o el derecho a no ser discriminado por razones de sexo, etnia o condición social.

En los últimos años algunos valores humanos y su correspondiente reconocimiento jurídico se han proyectado al mundo de los animales y por ello se habla de los derechos del animal, cuya idea fundamental consiste en reconocer de manera explícita que los animales merecen un respeto, unos cuidados y una protección. Esta visión se concretó en un documento en 1977 que sirve como propuesta y como referencia, el conocido como la Declaración Universal de los Derechos del animal. Como es lógico, esta propuesta tiene defensores y detractores y cada uno de ellos presenta sus argumentos.

Argumentos a favor

Quienes defienden los derechos del mundo animal afirman que su fundamento consiste en que todos los animales deben ser respetados por los seres humanos

Esto significa básicamente que los animales no deben ser maltratados bajo ninguna circunstancia. Por lo tanto, no se trata de que los animales tengan unos derechos per se como los tienen los humanos, sino que sean tratados de una manera digna (por ejemplo, que los animales de trabajo no sean sometidos a una actividad excesiva y que la muerte de un elevado número de animales sea considerada como un genocidio).

Los defensores de los derechos de los animales sostienen que su planteamiento debe entenderse como una obligación moral de los seres humanos hacia los animales. En otras palabras, el hecho de que los animales sean distintos a los humanos no los convierte en inferiores. Hay que recordar que cuando existía la esclavitud en la mayoría de países, los esclavos no tenían derechos y actualmente se considera un avance ético que no exista la esclavitud. De esta manera, los humanos avanzaríamos desde el punto de vista ético si reconociéramos unos derechos a los animales.

Los movimientos en favor de la protección jurídica de los animales hacen hincapié en cuestiones como las atenciones mínimas que deben recibir, la protección de la fauna en peligro de extinción o las condiciones legales que deben aplicarse en la venta de animales.

Posturas en contra

Quienes se oponen a los derechos de los animales consideran que el problema está mal planteado

Los animales deben ser tratados con respeto y de acuerdo con una serie de normas, pero es incorrecto hablar de derechos de los animales. Los derechos implican necesariamente unas responsabilidades y esta idea no es aplicable a los animales, pues carecen de libre albedrío y de capacidad de decisión. Dicho en otros términos, si un animal no puede diferenciar entre el bien y el mal no tiene sentido que tenga unos derechos.

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