Definición de Guerra Cristera

Entre 1926 y 1929 los católicos mexicanos se levantaron en armas contra las leyes anticlericales impulsadas por el gobierno liderado por el general Plutarco Elías Calles. Este enfrentamiento es conocido como la Guerra de los Cristeros, Guerra Cristera o Cristiada

El desarrollo de la guerra

El presidente Calles inició su etapa de gobierno con importantes reformas sociales para consolidar los ideales revolucionarios de la etapa anterior. Sin embargo, mantuvo una postura beligerante contra la iglesia católica. De hecho, el gobierno puso en marcha la llamada «Ley Calles», por la cual se restringía la libertad religiosa.

Esta situación provocó la reacción de la iglesia de Roma, que lanzó consignas para que los católicos mexicanos no respetarán la «Ley Calles». En distintos territorios mexicanos los católicos formaron un movimiento popular insurgente, pues entendían que la libertad religiosa estaba amenazada. En aquel contexto se formó una asociación de católicos conocida como «La liga de la defensa religiosa», cuyos miembros se oponían a las medidas del gobierno y a otros grupos católicos que querían separarse de la iglesia de Roma. Este clima de efervescencia hizo que el gobierno tomara la decisión de prohibir el culto en las iglesias. Los feligreses se empezaron a movilizar y así se inició la «Guerra Cristera».

En los campos de batalla se enfrentaron tropas del ejército mexicano y campesinos armados en defensa de la fe católica

Los campesinos popularizaron dos consignas en la defensa de los ideales católicos: «¡Viva la Virgen de Guadalupe!» y «¡Viva Cristo Rey!». Este último grito fue el que dio nombre a la denominación popular de Cristeros o Cristiada.

Los cristeros fueron perseguidos por el ejército mexicano, en las calles se produjeron intensas balaceras, las iglesias permanecieron cerradas y muchos católicos fueron ejecutados.

La Cristiada fue especialmente intensa en la región de Jalisco, pues los católicos jaliscienses formaron la llamada «Unión Popular», una organización campesina muy combativa contra las fuerzas militares gubernamentales. Se calcula que 200.000 mexicanos perdieron la vida en el conflicto.

El fin del conflicto

En 1929 finalizó el mandato presidencial de Plutarco Elías Calles y el nuevo presidente interino (Emilio Portes Gil) alcanzó un acuerdo con los representantes de la iglesia católica para que los servicios religiosos pudieran reanudarse con normalidad. El entendimiento entre la iglesia y el gobierno supuso el fin de la «Guerra Cristera».

En 2012 apareció en las pantallas mexicanas la película «Cristiada», un film que ha sido criticado por el estilo hollywoodiense y la escasa fidelidad a los auténticos acontecimientos históricos.

Fotos: Fotolia – Indigo – Christ